Imaginando un lugar sostenible
Julio, que tiene 9 años y va al colegio Mar Argentea de Torremolinos, está trabajando en un proyecto que es, a la par que divertido, muy transcendental para nuestro planeta; aprender sostenibilidad desde pequeños. Gracias a todas las personas que han participado en este pequeño video que explica como podemos ser más sostenibles.
Este ejercicio de reflexión nos sirve tanto a pequeños como mayores, imaginar todos los detalles sobre cómo sería un lugar sostenible ideal. La tutora de estos niños de cuarto de primaria, Gema Fuentes, les pidió a todos en la clase que hagan una maqueta sobre ese lugar soñado.
Hemos tenido una conversación en profundidad con él, y con más personas que se dedican a hacer un lugar más sostenible con su trabajo. sobre todos los detalles, que os contamos punto por punto;
- Cuidando el entorno: En su lugar ideal, las personas serían muy responsables. Todos tirarían la basura donde debe y mantendrían todo limpio. Si todos ayudan, el lugar se vería bonito y sin basura. También se cuidarían unos a otros, como ayudar a un amigo triste o a un abuelo que necesita ayuda. Sería como una gran familia.
- Picnics en los parques: En los parques, Julio piensa que habría lugares para hacer picnics. Las familias y amigos podrían sentarse en mantas, o mesas de madera con bancos, comer cosas ricas y charlar sobre lo que les gusta. ¡Sería genial ver a la gente sonriendo y disfrutando!
- Coches y energía limpia: En este lugar, habría coches eléctricos que ayudan a cuidar el planeta. También habría farolas que usan energía del sol. Los parques tendrían árboles bonitos, y la gente usaría cosas que se pueden reciclar, como botellas y bolsas. ¡Así el planeta estaría feliz!
- Todos un poco más felices: Julio cree que si respiramos aire fresco y vivimos en un lugar bonito, pudiéramos tener trabajo que nos gustará hacer y tener una casa todos seríamos más felices. Imagínate tener tiempo las familias para jugar en un parque limpio y disfrutar del aire puro. Además, tener una casa cómoda y segura.
- Divertirse sin gastar tanto: En este espacio sostenible, las cosas divertidas, como jugar o hacer cosas de ocio, serían para todos y no se tendrían porque costar mucho, de esta forma están más accesibles tanto en tiempo como en recursos para todos. Así, los niños y sus familias podrían pasar tiempo juntos sin preocuparse tanto por el dinero. ¡La diversión sería para todos! Teatros, picnis, actividades para niños, cine en espacios abiertos…El ocio nos hace desconectar y pasar momentos bonitos juntos.
- Ayudándose entre todos: En este mundo, las familias siempre se ayudarían. Serían como un gran equipo. Cuando todos son amables y se respetan, el lugar se siente bien.
- Tradiciones importantes: Julio también piensa que es importante mantener vivas las tradiciones, como recoger tomates o aceitunas. Esto es parte de nuestra historia y ayuda a la naturaleza.
- Comida rica y sana: En este espacio sostenible que imaginamos juntas, la comida sería buena y simple, como unos garbanzos, un arroz o recetas de siempre, que todos podrían cocinar juntos. Cocinar en grupo es divertido y ayuda a aprender. ¡Sería genial preparar una gran comida con amigos y familia!
Todos los niños de la clase están trabajando en una maqueta que mostrará este lugar soñado. Usarán materiales reciclables, para construir edificios y parques. Este trabajo creativo, no solo les enseñará a cuidar el planeta, sino que también podrán ser imaginativos y aprender unos de otros.
En resumen, el lugar que imaginan los niños no solo cuida el medio ambiente, sino que también hace que las personas sean felices, se ayuden entre sí, tengan hogares y disfruten de la vida. Con ideas como las de Julio, podemos soñar con un mundo mejor, donde todos se cuidan y somos amables.